Sueña (Yuri-Original)

Ella estaba mal, realmente mal... Le dolía todo el cuerpo, los ojos los tenía rojos de tanto llorar, sus muñecas aún le dolía por las heridas que ella misma se había hecho. Estaba en unos de sus peores momentos.
Pero es que aún ella no entendía porque habían terminado, o mejor aún por que ella le había terminado.
Es que todo esto era tan ilogico, hasta hace unas semanas atras ellas estaban de lo mejor, era por así decirlo: "La pareja más linda de todas".
Su relación llevaba ya 1 año y 11 meses POR QUE RAYOS LA HABÍA DEJADO SI YA CASI LLEVABAN 2 AÑOS!?...
Es que sus padres la obligaron? Sus amigos? o... ya no la amaba?... le dolía el pensar eso, se resistía a que eso fuera lo que sucediese. Ella aún la amaba demaciado para pensar en esa posibilidad.
-Ya paso no es para tanto- Escucho la voz de su padre que aún estaba molesto por todo el drama de que a su hija la había dejado su novia y por eso se cortó.
Qué ya paso? Qué no es para tanto? Como puede decir eso si ni siquiera ella sabía cuanto podía llegar a amarla? Cómo puede decirle eso alguien que está en la entrada al salón de los divorsiados?
-No me entiendes- Dijo ella simplemente.
-No es la unica persona en el planeta- Le contesto su madre.
-Pero es la que amo-.
-Ya paso un mes desde eso, dejalo ir- Dijo nuevamente.
-Un mes pero duele igual-.
-Ya olvidalo, ahora vamos a ir a lo de Susana y te distraeras un rato ahí.
Iban en el auto; ella en la parte trasera. Estaba vestida con unos pantalones de jean y una campera de cuero negro. Hacia demasiado frio, estaba en puro invierno y a sus padres se les ocurria salir.
Miraba tristemente por la ventanilla del coche, el invierno pasado lo paso entre las sabanas de Melisa, ahora estaba sola y triste.

El timbre de la casa sonó.
-Hey! Hola- Una mujer rubia y alta les recibió -Pasen, pasen!-.
-Hola Susi- Dijo la chica.
-Chicas llego Jailen!!- Akira gruño bajo por el apodo que le había puesto sus amigas hace tiempo.
-Jailen!- Llegó la del medio y la saludo.
-Hola!!- Llego la menor, la cual la creía a ella como su hermana mayor.
-Tanto tiempo chicas- Sonrio y rió ante la mirada sorprendida de sus amigas.
-Estas teñida...- Comenzó la menor
-y de rojo- Termino la otra.
-jaja se-.
-Te queda hermoso-Dijo su madre. -Meli baja!-.
-Ya voy- Se escucho la voz de la mayor de sus tres amigas, la de su misma edad.

Se encontraban en el living hablando mientras que los adultos estaban en el comedor.
Eve... que era la del medio, tan solo un año menor que ella se encontraba sentada en el sofá unitario, mientras que Lorena, la menor se encontraba sentada en sus piernas como era de costumbre.
-Y como andas che? Hace tanto que no nos vemos-.
-Bien- Como decirle que en ese momento su cuerpo era el que estaba ahí, su mente y alma se hallaba el Melisa.
-Me llegaste peliroja Akira-chan-.
Ella volteo para saludar a la mayor. Sus palabras murieron en su boca.
-No me saludas más Akira-chan-.
-Ho-hola Aome- Respondio como robot.
Llevaban un año entero sin verse... todas había cambiado pero la que más había cambiado fue ella.
La miro de arriba a abajo.
-Wou- Dijo sorprendida.
-"Wou" que?- Se extraño la rubia de rulos.
-Estas cambiada-.
-Si? En que sentido?-.
-Dejalo ahí-.
La siguiente hora, por alguna razón no le quito los ojos de encima a su amiga.

Recorria su cuerpo con la mirada mil veces, la rubia tenía algo que hacía que no le quitase los ojos de encima.
-Akira-chan tengo unos nuevos fics para mostrarte, veni- Melina le llamo empezando a subir la escalera.
-Ok- Le respondió decaída la otra.
-Akira-chan arriba el animo- Dijo como si hubiera sabido de su estado por más de que lo haya estado ocultando todo este tiempo. De repente sin aviso la chica rubia dio un salto desde el segundo escalon. Akira se sorprendió y por inersia abrió sus brazos para recibirla. Melina cayo entre los brazos de su sorprendida amiga.
-Te quiero- Susurró bien bajito a su oído mientras la abrazaba.
Y así como comenzó termino la situación; la chica subió rapidamente la escalera. Eve y Lorena se fueron a ver que hacia los adultos. Akira las observo perderse y miro nuevamete a la chica en la cima de la escalera. La siguió rumbo a la terraza?.
-Que hacemos aquí?-.
-Ahora esta es mi pieza- se rio. refiriendose a la habitación que se encontraba en el patio.
Perfecto, nadie las molestaría.